Suecia fue el primer país del mundo en instituir un día del año como "Día del árbol". Esto ocurrió en 1840 cuando se había tomado conciencia de la importancia que tienen los recursos forestales y del cuidado que se debía brindar a los árboles.
Años más tarde, muchos suecos emigraron a Estados Unidos y llevaron consigo esta valiosa herencia cultural, cuyo ejemplo sirvió para que EEUU, en 1872, también instituyera su "Día del árbol".
Y a partir de allí comenzaron a establecerlo los otros países del continente y del mundo.