Si bien es cierto que el número de personas preocupadas por conservar el medio natural no ha dejado de crecer en los últimos tiempos, la alta concienciación social sobre la importancia de mantener actitudes como el reciclaje o la reutilización, no afectan por igual a todo tipo de residuos. De esta forma, mientras los hábitos ecológicos alcanzan con frecuencia al papel, el vidrio, el plástico o las pilas, otros desechos como la basura tecnológica no es objeto de la misma concienciación social, y supone un peligro considerable para la naturaleza.
Y es que precisamente la alta posibilidad de contaminación de este tipo de residuos, que se elevan hasta más del 1% de los materiales sólidos del mundo en la actualidad, ha llevado a no pocos países a establecer normas para controlar su eliminación. Sin embargo, ninguna actitud de cuidado del medio en este sentido tiene una incidencia mayor que los hábitos individuales que cada ciudadano pueda ir realizando desde su día a día.
Para conseguir ese mayor equilibrio entre el desarrollo tecnológico y la protección de lo natural, es importante seguir unas sencillas pautas de cara al reciclaje de los dispositivos:
- Recicla lo que ya no sirva. La mejor conducta ecológica en relación a los aparatos tecnológicos pasa siempre por el reciclaje. A pesar del desconocimiento sobre la importancia de reciclar dispositivos de este tipo, los aparatos electrónicos contienen una alta cantidad de elementos tóxicos y nocivos para el medio, como plomo o mercurio. De esta forma, si quieres deshacerte de algo que ya no funcione o no utilices, procura llamar al fabricante para saber como hacerlo sin dañar el medio natural o ponte en contacto con la empresa de basuras de tu comunidad. Busca además a través de páginas de avisos online elementos pueden ser separados por piezas para un reciclaje más efectivo y responsable.
- La vida útil de un aparato puede alargarse. Este gesto, que puede ser realizado en más ocasiones de las que parece, conseguirá que protejas los recursos del planeta y evites crear basura innecesaria. Para alargar la vida útil de un producto compra siempre dispositivos de buena calidad y úsalo siguiendo las recomendaciones del fabricante. No cambies además de sobremesa, portátil o Smartphone sólo por moda, y mantén una conducta consciente sobre el consumo.
- ¿Por qué no comprar y vender de segunda mano?. En páginas de avisos en la web, donde es fácil encontrar anuncios de casas en venta o de cualquier otro producto, podrás vender lo que ya no quieras o necesites y comprar lo que deseas. No dejes de apostar por el mercado de seminuevos y cuidarás de tu economía y de la naturaleza.
- Alguien necesitará lo que ya no quieres. No tires tus dispositivos, aunque ya no funcionen, antes de buscar en tablones de avisos como esta basura tecnológica puede ayudar a otras personas. No son pocos los colegios y talleres para gente sin recursos que los reutilizarán para aprender electrónica o mecánica. Donando lo que no quieras ayudarás a la sociedad además de evitar generar nuevas basuras.
- No dejes de apagar tus dispositivos. Una buena forma de ahorrar energía al planeta, y de conseguir que tus aparatos electrónicos no se gasten antes de tiempo, es apagarlos completamente cuando no les des uso, evitando dejar encendido incluso el piloto rojo encendido.